¿Cómo podemos ahorrar combustible y evitar accidentes por reventón de un neumático?
Controlar la presión y la temperatura de los neumáticos de un camión en tiempo real puede ser una buena solución para evitar imprevistos y reducir costes en mantenimiento y combustible. Los neumáticos inteligentes para camiones, van equipados con sensores que transmiten datos en tiempo real sobre presión y temperatura y proporcionan al usuario la posibilidad de enviar esta información a su sistema de gestión de flota para hacer un diagnóstico y un mantenimiento remoto de su estado.
Con esta información, los vehículos pueden circular con la presión correcta de inflado, optimizando la conducción, reduciendo el consumo de combustible en un 3%, limitando además las emisiones de CO2 y aumentando la vida de los neumáticos en un 20%, asegurando a la vez los tiempos de actividad. Todo ello redunda en una mayor eficiencia en la gestión de la flota y en la reducción de los costes operativos así como un mejor servicio al cliente. Además, los sistemas telemáticos permiten la monitorización de estos neumáticos en tiempo real, incluso cuando no están enganchados a la cabeza tractora, lo que evita muchas incidencias en la recogida de los semirremolques.
Dado que la información captada por los sensores de neumáticos inteligentes para camiones se muestra de manera inmediata y con alertas a través del sistema telemático, los usuarios pueden tomar inmediatamente las medidas oportunas para evitar incidencias con los neumáticos y optimizar de esta manera su rendimiento, al tiempo que se garantiza la seguridad al minimizar las averías. Asimismo, los neumáticos inteligentes suponen un avance en la gestión del neumático y el control de la flota, puesto que evita la necesidad de realizar algunas operaciones de mantenimiento manuales, optimizando también los tiempos de taller y rentabilizando la operativa en la gestión de los vehículos. Teniendo en cuenta las consecuencias que puede tener un reventón, quizá valga la pena digitalizarse, reducir costes y mitigar riesgos.